Medida estrella para asentar población

Publicada el 28/12/2025 a las 07:00 en la sección de Ayuntamiento, Sociedad

Si en estos días se accede a la carretera de circunvalación por alguna de las vías que atraviesan el municipio, es posible encontrar largas colas de vehículos que intentan abandonar el pueblo sin éxito. El motivo es la reciente instalación, por parte del Ayuntamiento, de varios semáforos en las salidas del casco urbano que permanecen permanentemente en rojo.

Desde el equipo de gobierno municipal se ha explicado que la elección de estas fechas no ha sido casual. Según uno de sus miembros, la medida coincide con el regreso al pueblo de muchos hijos e hijas del pueblo durante las fiestas navideñas, “como el almendro”, y pretende favorecer su permanencia. El objetivo declarado es fomentar el asentamiento de población, una iniciativa que, aseguran, está dando resultados inmediatos. Solo el pasado 26 de diciembre se registraron 58 nuevos empadronamientos.

En los primeros días, la situación generó cierta confusión entre los conductores, y todavía se observan vehículos detenidos ante algunos de los semáforos, que permanecen en rojo desde su puesta en funcionamiento el pasado 23 de diciembre. No obstante, desde el consistorio señalan que los nuevos residentes comienzan a adaptarse progresivamente a la vida y costumbres del municipio.

Como ejemplo, una familia procedente de Murcia que accedió al pueblo por error ya ha alquilado una vivienda en la zona de La Matilla y ha iniciado los trámites para escolarizar a sus tres hijos en el colegio Benito León, con el fin de que puedan reincorporarse a las clases tras las vacaciones. La familia permaneció dos días detenida ante el semáforo situado en la salida hacia La Bañeza y, según relatan vecinos, acuden cada tarde a comprobar si finalmente la señal cambia de rojo a verde.

Sí, esta es la “inocentada” de este año. A través del humor y la sátira, se ha querido poner el foco en un problema que va mucho más allá de este municipio y que afecta de forma generalizada a la provincia y al conjunto de la región leonesa: la pérdida continuada de población en el medio rural. La despoblación es una realidad persistente que condiciona el presente y el futuro de nuestros pueblos. Más allá de iniciativas puntuales destinadas a atraer nuevos vecinos, el reto exige medidas estructurales y sostenidas en el tiempo que permitan fijar población, garantizar servicios y ofrecer oportunidades reales de desarrollo. De no abordarse con la seriedad y el compromiso necesarios, el desenlace a largo plazo es conocido todos.